SANTA MISA 23 DE SEPTIEMBRE DE 2024. "¿QUIÉN PODRÍA ENTRAR EN TU TEMPLO?" Prov 3,27-34; Sal 14; Lc 8, 16-18 Nuestro salmo responsorial originalmente se cantaba a la entrada del Templo en Jerusalén. Como en muchas religiones antiguas, los levitas judíos que vigilaban el Templo exigían ciertos requisitos de quienes pretendían entrar en él. Vemos alusiones a requisitos de entrada en, por ejemplo, Zac 7,3 Y Ageo 2, 11. Pero el salmo de hoy trata explícita y claramente de tales requisitos porque empieza con la pregunta, "Señor, ¿quién podrá habitar en tu Templo?" (v. 1), y prosigue con una respuesta extensiva. Hay que notar que los requisitos no son de índole cultual, como por ejemplo el lavado de las manos o cierta indumentaria, sino de carácter ético. Primero hay una sentencia de la actitud fundamental necesaria (v. 2) y luego ejemplos de esta actitud que enfatizan el comportamiento ético-social. Hoy, ¿cómo nos preparamos para entrar en la Misa?