Todo creyente que verdaderamente desee madurar espiritualmente debe trascender de una lectura casual y esporádica de la Biblia, a una lectura sistemática la cual incluya la reflexión y transformación de lo leído. Para lograrlo, debemos desarrollar la disciplina de la lectura bíblica en nuestras vidas.

En la segunda parte del tercer mensaje de la serie “Disciplinas espirituales para una vida cristiana fructífera”, el pastor Erick Zaldaña nos comparte cuatro desafíos de la meditación bíblica que debemos comprender. Asimismo, nos reafirma que la Biblia sigue siendo relevante en nuestros tiempos, por contener la historia y el futuro del plan de Dios para la humanidad.